domingo, 27 de abril de 2008

En que momento?

Y regreso a ti, mi Poder Superior, con la cabeza agachada mirando al suelo, con un sentimiento de derrota... creí una vez más que era yo capaz de llevar mi vida, guiarla y ser feliz yo solo, pensando en que la felicidad está en que varias mujeres me dijeran "que guapo estas" "uuuy que bien te ves" "uuuy eres un bombon.." si bueno.... y luego? que sigue de eso? Fernando sabe que no puede darse el lujo de basar su vida en ese tipo de comentarios, que a fin de cuentas no son solo mas que eso... comentarios. Por eso hoy Dios acudo a ti, para que me concedas el valor y la fuerza para aferrarme a ti y no a esos comentarios que duran tan solo un instante.

He de confesarte que no se en que momento te aleje de mi diario vivir, llegó un momento en el que la literatura no me entró ni a bola de golpes y todo lo referente a esto lo quise mandar lejos, muy lejos.

Y.. donde quedó todo aquello del sano juicio? donde quedó aquello de dejar mi vida y mi voluntad en tus manos ??? y la verdad hasta me fastidia estar escribiendo esto... pero el dia de hoy tengo que hacer un esfuerzo y mandar lejos lo que mi enfermedad me dice. Por eso estoy externándola en estos momentos y por estos medios.

Y luego.. como mis huevos no salen al gusto, es decir el viaje que tenia planeado a Guadalajara no se va a dar de la manera en que yo queria, ya hice mi berrinche Dios, se que tu voluntad es tal vez que no vaya por mucho tiempo, tu sabras porque y yo lo desconozco, la neta... te soy sincero, no me gusta tu decision ... pero lo mejor que puedo hacer es aceptarla... y seguir adelante... solo tu sabes porque haces las cosas....

domingo, 6 de abril de 2008

Y como va a querer sus huevos ?

En muchas ocasiones se me ha hecho esa pregunta, y sin duda alguna, en casi todas las ocasiones he respondido "al gusto por favor" ... lo que no habia hecho consciente hasta hoy dia, es que eso solo aplica, para mi vida en los restaurantes a los que ocasionalmente he ido a desayunar o comer, ya que dentro de mi vida esto no ha hecho mas que complicarme la existencia.

Con este párrafo introductorio, lo que quiero expresar es que durante aproximadamente veinte años he querido hacer de mi vida lo que se me antoja, y cuando no sale así, hago berrinche y presento un comportamiento infantiloide, planteandolo de una manera más coloquial, me comporto como un Chabelote, ya que por el historial que tengo, poseo muy poca tolerancia hacia la frustración, y para acabarla de chingar, toda la vida creí que podia cambiar a los demas, porque aquellos eran los que estaban mal, no yo... yo estaba lleno de cordura y sano juicio, y al no poderlos cambiar me sentía terriblemente derrotado, incapaz y ademas desagradecido con la vida. Sin capacidad de agradecer ni disfrutar de ningun momento de mi vida, o disfrutar pocos de ellos.

Gracias a este proceso de recuperación poco a poco he ido comprendiendo que en realidad el que tiene la última palabra no es este escritor, ni una pareja, ni la familia, ni el tendero de la esquina, sino un ser que va más alla de toda comprensión humana, un ser que siempre ha estado ahí conmigo y que tiene planes para la existencia de Fernando. Lo único que tengo que hacer es aceptar ese simple hecho, y dejar de protestar, dejar de protestar por lo que no tengo o por lo que no me gusta, y comenzar a agradecer y aceptar lo que llega a mi, ya que todo esto que llega, es una oportunidad para crecer.

Toda la vida he estado pidiendo las cosas de manera equivocada cuando dialogo con ese Poder Superior, toda la vida le he dicho "Dios, si existes, quiero que hagas..." en lugar de decir "Dios que se haga lo que tu tienes planeado para mi" y con esto no quiero caer en los conformismos clásicos religiosos, esto va más alla, va con la actitud mencionada unas palabras antes, una actitud de agradecimiento, aceptación, aprendizaje y crecimiento. Lo único que tengo que hacer es actuar y permitir que esa pequeña voluntad circule dentro de mi y me permita hacer lo que tengo que hacer sólo por el día de hoy... para que me la hago de pedo que si una semana, o que si un mes o un año... no me atormento por aquel futuro tan lejano... simplemente hago lo que hoy tengo que hacer para llevar este proceso de recuperación, para cumplir mis metas en el trabajo, para estar bien conmigo mismo, con mi familia y con la sociedad.

No se puede creer en Dios y desafiarlo a la vez.